Narciso Guaramato Parra
En un artículo anterior hice referencia al equipo de beisbol del año 1975 “Los Rojos de Cincinnati” como ejemplo de lo que debe ser un equipo. Pero después m di cuenta que había cometido una gran omisión. Hubo un equipo que sin lugar a dudas es el mejor equipo jamás conformado. Me estoy refiriendo a la selección de basquetbol que representó a Estados Unidos en los juegos olímpicos celebrados en la ciudad de Barcelona (España) en 1992, conocido popularmente como “The dream team” o el equipo de ensueños.
El mismo estaba integrado por los jugadores profesionales: Charles Barkley, Larry Bird, Clyde Drexler, Patrick Ewing, Magic Johnson, Michael Jordan, Karl Malone, Chris Mullin, Scottie Pippen, David Robinson y John Stockton. Todos ellos leyendas de la National Basketball Association (NBA). Es decir lo mejor de lo mejor,
Lo más grande de este equipo no fue su plantel de jugadores, sino la gran lección que demostró en la cancha:
a) Responsabilidad y humildad: Estados Unidos venía de una serie de derrotas en las finales del basquetbol olímpico y para revertir estos resultados y demostrar su supremacía en este deporte, se convocó a los jugadores que formarían parte del Dream team. Estos demostraron una gran humildad al aceptar la misión encomendada y formar parte de un equipo en donde ya no serían los líderes incuestionables a que estaban acostumbrados. Igualmente mostraron una gran responsabilidad al trabajar intensamente para alcanzar el objetivo planteado. Al final lo lograron con creces. Ganaron la medalla de oro y demostraron al mundo, sin ninguna duda, que eran los mejores.
b) Tenían una meta: con el conocimiento claro de sus fortalezas, los jugadores sabían que solamente existía un equipo que podía impedir su triunfo, ellos mismos. La superioridad y la excesiva confianza eran las debilidades que tenían y que fueron causa de los deficientes desempeños que tuvieron selecciones posteriores. Para neutralizar esta posible amenaza, el Dream Team 1992, se fijó una meta, posible y cuantificable: cada juego que realizaran lo debían ganar con una diferencia igual o superior a 30 puntos. No hace falta decir que en todos los juegos cumplieron la meta.
El Dream Team 1992 sin lugar dudas fue el equipo más grande jamás estructurado. La comprensión a cabalidad de sus integrantes de lo que es trabajar en equipo, permitió a Estados Unidos volver al sitial de honor en el basquetbol y adicionalmente deleito a los miles de fanáticos que alrededor del mundo los vio jugar.
Guatuire,30/10/09
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