viernes, 28 de agosto de 2009

LAS SIETE REGLAS RADICALES PARA EL ÉXITO DE LOS NEGOCIOS


Gay Hendricks y Kate Ludeman

REGLA 1. Di siempre la verdad, especialmente referente a hechos y sentimientos personales.

REGLA 2. Asume siempre el ciento po ciento de responsabilidad en cualquier actividad que emprendas.

REGLA 3. Respeta escrupulosamente todos los compromisos que hayas adquirido y haz que los demás respeten los que han adquirido contigo.

REGLA 4. Nunca propagues rumores sobre los demás ni interfieras en la comunicación entre otras personas.

REGLA 5. Dedica un tiempo diario al pensamiento creativo y respétalo escrupulosamente.

REGLA 6. Haz una lista con las cosas que tengas que hacer y renuévala a medida que avance la jornada Pon primero las actividades que te gusten menos y libérate cuanto antes de ellas.

REGLA 7. Ve siempre al origen. Cada vez que oigas algo que te haga sentir incómodo, habla con todas las partes implicadas y escucha atentamente


martes, 11 de agosto de 2009

EMPRESARIOS EN DESARROLLO

Se ha hecho costumbre llamar a la persona que inicia una pequeña empresa o negocio como “microempresario”. En lo personal considero como inadecuado esa terminología dado que: a) como sabemos el prefijo micro, el cual es un término tomado de la física, se utiliza para destacar lo muy pequeño.. Se entiende que una empresa puede ser pequeña, en operaciones, en capital invertido o en número de trabajadores, pero es incomprensible que se hable de una persona como micro, una persona es una persona y punto. Y uno es empresario o no; b) Psicológicamente el término microempresario es denigrante, discriminatorio. despectivo, baja la autoestima, empobrece las aspiraciones y limita las posibilidades.

Tomando prestadas las palabras del consultor colombiano, Ivan Mazo Mejía “a mucho de los mal llamados microempresarios, como consecuencias de creerse micro, se vuelven víctimas de una carencia de mentalidad empresarial. Un verdadero empresario jamás se siente pequeño porque, independientemente de que se tenga una infraestructura de poco monto, lo que si tienen es una proyección mental contundente de gran alcance. Otro vacío es que muchos no diferencian lo que significa tener un negocio de lo que significa tener una empresa. Estudian poco, no investigan, planean para el día e improvisan constantemente desde las circunstancias que se van presentando. A uno le parece que están más en la lucha por la sobrevivencia que en la búsqueda de una sólida prosperidad empresarial. Definitivamente, el empresario empieza por una mentalidad de alto vuelo y que por ninguna razón permite que se le minimice”.

Una Institución Financiera venezolana, utiliza el término “empresario popular”, pero igualmente al usar el término popular limita su campo de acción ¿Qué se entiende como popular? ¿Qué provienen de sectores humildes? ¿Qué su mercado meta es de bajos recursos?, en verdad no lo se bien. Al realizar una pequeña consulta entre mis conocidos, la expresión no fue bien recibido, ya que era asociado únicamente a los llamados buhoneros, cuando ellos son solo parte de la población a que nos estamos refiriendo.

Ser empresario es una actividad que debe ennoblecer a la persona, todo aquel que inicia una empresa por muy pequeña que sea debe sentirse orgullosa de su labor y su visión debe ampliarse a todas sus posibilidades de crecimiento y desarrollo. Debe ser origen y catalizador de un empresariado moderno que contribuya al engrandecimiento del país.

En Venezuela nos hemos limitado básicamente a prestarle servicios crediticios, cuando el verdadero problema, la verdadera causa del fracaso de cientos de empresa es la falta de preparación, la falta de conocimientos técnico gerenciales que les permita llevar una gestión exitosa. Por lo tanto es necesario crear programas educativos que permitan el crecimiento de los nuevos emprendedores, de tal manera que se tenga un grupo de empresarios que estén desarrollando sus habilidades. Deberíamos estar hablando de empresarios en plena evolución. Por tal motivo, el término que deberíamos usar es el de empresarios en desarrollo.

domingo, 9 de agosto de 2009

ANTES DE COMENZAR UN PROYECTO



El éxito consiste en pasar del fracaso en fracaso sin perder el entusiasmo hasta llegar. No importa el tiempo qu lleve, tu mente debe estar determinada a triunfar, pese a las circunsatancias, al exterior y lo que se oponga a tu visión. La mentalidad de avanzada y la predisposición que poseas es la que te convierte en un generador de éxito.
Por esto, antes de comenzar un proyecto tené en cuenta:
1) Desarrollo de las metas a seguir y el plan diseñado para llegar a ellas.
2) Determina lo que se espera de cada meta.
3) Obtener un claro detalle de la información requerida: costos, beneficios y dificultades posibles que puedan surgir a mitad del camino.
4) Una vez que tenés la información requerida, accioná y ser perseverante y responsable hasta el final.
Cada día lee más. Mientras viajás poné en tu auto cassettes, programas que beneficien tu desarrollo mental, mrá menos TV, júntate con los que sueñan y se proyectan como voz, décidete a mejorar cada día...; mezclá análisis con riesgo. Lee las últimas novedades que haya sobre tus objetivos a alcanzar, le un libro po semana la pregunta, aprendé a plantear la pregunta si no alcanzá la respuesta adecuada. Es tan importante reponder como saber preguntar bien, analizá el terreno en la cual te vas a involucrar, de esa forma podrás sumar a tu conocimiento nuevos datos y mayores hrramientas que te oermitirán espcializarte, ser el mejor y revertir cualquier error o fracaso que se presente. Si a tu propósito le sumas mejora permanente te convertirás en una persona de avanzada. Y por cierto, cada día avanzarás con mayor rapidez que la qu estas acostumbrado.
Bernardo Etamateas
Fracasos Exitosos

miércoles, 5 de agosto de 2009

COACHING


Cuando comencé mi formación en PNL me cautivó la importancia de la escucha, la del otro y la de nuestras emociones siempre presentes, descubrí por qué se producen tantos malentendidos en la comunicación, en definitiva lo importante que resulta conocer los mecanismos que actúan en ella.
Por entonces no sabía nada acerca del coaching aunque casi enlacé la PNL con el Coaching en cuanto una amiga me explicó en qué consistía, me pareció un camino natural pues me cuesta concebir el coaching sin conocimientos de PNL y de muchas cosas más que lo alimentan.
Es una excusa para mi curiosidad de conocimiento pues creo que cualquier experiencia vivida con conciencia de ser bella, útil o interesante de alguna manera va a los "circuitos nutritivos" y apararecerá sorpresivamente en la práctica profesional. El abanico es amplísimo: cine, teatro, literatura, historia, pintura, pasear por la naturaleza, una cena romántica o con amigos, neurociencia.....
El encuentro con el coaching coincidió en el tiempo con una situación de falta de estímulo en mi profesión anterior y de búsqueda inconsciente en ese momento de otras cosas. Hoy creo que no fue un encuentro casual y que se produjo una continuación natural de una etapa con otra. Como abogado mi mayor satisfacción era la relación personal con los clientes, era mi motivación para ayudarles. Como coach la motivación es la misma, tan sólo cambian los temas que tratas y la forma en que ayudo.
Casi me atrevo a decir que antes de conocer el Coaching, había estado haciendo una especie de "coaching natural" sin ser consciente de ello. Mis amigos y clientes se sentían valorados y eran capaces de sacar lo mejor de sí mismos para afrontar nuevas situaciones o problemas legales, no escatimaba tiempo hasta percibir en ellos que habían tomado conciencia y aceptado su cualidad especial, fuera la que fuese.
Cuando valoras a tu interlocutor, le escuchas con verdadero interés y le ayudas a sacar lo mejor de sí mismo para continuar su camino estás haciendo coaching. Claro que esto lo entiendes cuando eres coacH.


Fuente: International Coach Federation - España